Los electrodomésticos facilitan mucho la preparación y la cocción de los alimentos. Sin embargo, es necesario que le dediquemos tiempo a su limpieza. Este proceso puede ser un poco abrumador, pues en muchas ocasiones no sabemos si lo estamos haciendo correctamente. Cuanto más pequeños se vuelven estos artículos, más piezas se tienen que lavar.
Por molesto que sea limpiar tus electrodomésticos, tenemos que hacerlo para alargar su vida útil. Especialmente cuando tiene pequeñas ranuras y anillos que pueden ocultar fácilmente la comida vieja y demás residuos. A continuación, te presentamos algunos consejos que pueden ayudarte a lavar tus artículos de cocina fácil y rápido.
Métodos para lavar cada uno de tus electrodomésticos
Licuadora
Para disolver los trozos más pegados de comida en tu licuadora, todo lo que necesita es un poco de vinagre. Simplemente coloca partes iguales de agua y vinagre en la licuadora, después mezclamos un poco, verás que todos estos fragmentos desaparecen.
Horno
Aunque la mayoría de los alimentos no entran en contacto directo con el interior del horno, los alimentos se pueden derramar, hay líquidos que salpican todo el interior y las molestas migajas. Todo esto puede producir olores y humo que pueden ensuciar tu cocina. Además de afectar el sabor de tus alimentos. Para limpiar el horno necesitas soluciones especiales que despeguen los residuos. Es mejor hacer la limpieza de este artículo en la noche para que por la mañana esté limpio y seco. Al utilizar jabón especial para hornos tenemos que dejarlo reposar de 10 a 12 horas, para que la desinfección sea eficaz.
Microondas
El microondas debe limpiarse con frecuencia para evitar la acumulación de basura y alimento. Lo mejor es usar una esponja con agua caliente y jabón para limpiar el interior y asegúrese de lavar la placa de microondas. Dejamos que se seque por completo antes de volver a ensamblar. La puerta debe quedarse entreabierta para que salgan los olores.
Cafetera
Hay dos formas de limpiar tu cafetera: con polvo descalcificador o utilizando vinagre. Si estás usando un polvo descalcificador, disuélvelo en un litro de agua tibia. Luego, vierte el agua en el depósito de agua de tu cafetera y prepara el tanque lleno sin nada de café. Después, vacía la solución y vuelve a llenar el tanque de agua con agua fresca y está lista para volverse a utilizarse. Para el vinagre, llena el depósito de agua de tu cafetera con una parte de agua y una de igual medida de vinagre. Prepara el tanque lleno de agua sin café, permite que el vinagre limpie profundamente el aparato. Una vez que hayas terminado, vacía el agua y repita el segundo paso una vez más. Si hay olor o sabor a vinagre, repite el enjuague una vez más con una cucharada de café molido.
