Numerosos estudios han relacionado un mayor consumo de ciertas verduras saludables con un menor riesgo de enfermedades crónicas, como enfermedades cardíacas, diabetes y algunas neoplasias malignas.
Espárragos (de las mejores verduras)
Los espárragos son un diurético natural y un prebiótico, lo que significa que alimentan a las buenas bacterias intestinales. Toma un puñado de espárragos la próxima vez que vayas al supermercado, ya sea que te gusten asados o cocidos.
- Solo se encuentran unas pocas calorías en los tallos, pero tienen un alto contenido de fibra y micronutrientes como ácido fólico, vitamina C, vitamina A y vitamina K.
Guisantes
Los guisantes son ricos en vitamina A, vitamina C, vitamina K, fibra y el antioxidante clorofilo, que les da su color verde vibrante. Cuanto más tiempo los cocines, menos vibrantes se vuelven. Se pueden cocinar al vapor, saltear o servir crudos como guarnición o en ensaladas.
Verduras como la espinaca
Este verde frondoso es uno de los vegetales más adaptables; cómelo crudo en una ensalada, salteado, cocido o mezclado en un batido para obtener tus verduras diarias. Una taza proporciona su necesidad diaria completa de vitamina K, así como una cantidad significativa de vitamina A (¡casi la mitad de la ingesta diaria recomendada en una porción!) y vitamina C, todo lo cual sirve para mejorar y fortalecer su sistema inmunológico.
- También tiene un alto contenido de nitratos, que se han relacionado con una mejor salud cardiovascular en estudios; por lo tanto, al igual que Popeye, coma esta hoja verde con regularidad.
Nabos
Este tubérculo crucífero (similar a la col rizada, el brócoli y las coles de Bruselas) es bajo en calorías, rico en fibra y rico en minerales, como calcio, fósforo y potasio. Los nabos no solo son asequibles, sino que su sabor suave los hace fáciles de incluir en una amplia variedad de platos.
- Para una alternativa reducida en carbohidratos a las papas, intente asarlas o triturarlas.
