La estufa de gas ofrece excelentes capacidades de cocción y un control superior sobre los ajustes de temperatura. Muchos chefs profesionales y caseros prefieren la de gas que la eléctrica.
Al igual que con cualquier aparato de línea blanca, estar familiarizado con las partes de una estufa de gas y lo que hacen puede ayudarte a aprovecharla mejor y mantenerte seguro durante su uso.
Partes de una estufa
Los elementos más evidentes de una estufa de gas están a la vista: los quemadores de la estufa. Normalmente, hay 4 o 6 quemadores y se elevan por encima de la superficie y, por lo general, cuando se enciende el quemador brillará en azul.
Las perillas se encuentran en la parte posterior, generalmente en un panel perpendicular y al girar y presionar, permiten el escape de gas. Pueden estar ubicados al centro según el modelo que tengas.
El panel de control es otro aspecto importante. Esto puede ser o no el lugar donde se encuentran los botones de encendido y apagado, de donde sale la chispa que complementa al escape de gas.
Las válvulas de gas se encuentran detrás de las perillas de control. A medida que se abre o se cierra la válvula, se permite que llegue más gas a los quemadores para cocinar.
Si tienes un horno conectado a la estufa, hay un termostato que regula la temperatura del horno. Un tubo de cobre se extiende desde el interior del horno hasta la válvula de gas y permite la entrada de gas adicional según sea necesario para cambiar la temperatura.
Consideraciones de seguridad importantes
Asegúrate de saber cómo opera la estufa antes de comenzar, estas pueden presentar riesgos de fugas de gas y, como con cualquier tipo de estufa, el riesgo de incendios y quemaduras. Nunca deje objetos encima cuando no esté en uso y que esté limpia antes de comenzar a cocinar.
Mantén a los niños y las mascotas alejados de su estufa de gas, incluso cuando no esté en uso. Uno de los peligros de las estufas de gas surge si un niño o una mascota activa accidentalmente la perilla gas, podría causar un escape peligroso que puede ser mortal.
Finalmente, dado que las estufas de gas también pueden conectarse a la electricidad para alimentar los paneles de control y otras funciones electrónicas, deben desenchufarse antes de intentar solucionar problemas o trabajar con cualquier parte de la estufa.
