Ese tupper de relleno de tacos que empujaste al fondo se pudre, después de algunas semanas, todo tu refrigerador comienza a oler como una tienda de comestibles. Si tiendes a olvidarte de las sobras, hay algunas otras medidas que puedes tomar para evitar los malos olores en tu refrigerador.
Descubre como prevenir olores del refrigerador
Consejo rápido: ¿Algún artículo de tu línea blanca te está causando problemas y ya te cansaste de mandarlos a arreglar? Te recomendamos comprar un nuevo modelo, ya que actualmente puedes encontrar diferentes opciones a excelentes precios.
- Comprueba si hay comida en mal estado
Lo primero que debes hacer es limpiar la nevera. Si no encuentras la causa del olor, es probable que el olor nauseabundo continúe sin importar cuánto limpies el refrigerador.
Verifica todas las fechas de vencimiento y elimina cualquier producto podrido. Si algo huele mal, es probable que ya esté estropeado. Esto puede suceder por varias razones, como que la temperatura sea demasiado alta, que la puerta no se cierre correctamente o que la comida en sí sea un lote incorrecto.
Saca el resto de la buena comida del frigorífico y colócalo en un fregadero lleno de hielo. Si solo hay un fregadero en la casa, debes mantenerlo abierto, así que coloca tus alimentos en una hielera temporal.
- Saca los estantes y limpialos
A partir de ahí, retira los estantes y agarra una toalla. Usa agua caliente y un simple jabón para platos para limpiar los estantes como lo harías con cualquier otro plato. Tienes que quitar los estantes para que las bajas temperaturas no hagan que el agua se congele o se pegue, lo que puede empeorar el olor.
Aborda el resto del refrigerador mientras lo hace. Esto significa aprender a limpiar la parte superior de tu refrigerador y cómo limpiar las bobinas. Estos lugares también pueden retener los olores que estás buscando eliminar.
Una vez que los estantes y el resto del refrigerador estén secos, puedes volver a poner todo en su lugar.
- Utiliza el poder del bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio, el producto original “lo hace todo”, también será tu salvador para ayudar a eliminar esos desagradables olores. Simplemente llena un recipiente con bicarbonato y déjalo en el refrigerador por un par de horas o, preferiblemente, durante la noche.
- Utiliza recipientes herméticos
Dile adiós a los días de envolver tus envases con papel de aluminio; en su lugar, intenta utilizar envases herméticos y reutilizables. Esta es tu mejor opción para prevenir futuros olores.
Usa recipientes que no retienen olores, como el vidrio. El vidrio no retiene los olores de la misma manera que ciertos plásticos, porque el vidrio no es poroso ni metálico.
Aunque el plástico no es poroso inicialmente, el desgaste de los utensilios y el tiempo en el microondas significa que desarrolla poros, que absorben todos los olores desagradables.
- Ajusta la temperatura del frigorífico
Los alimentos pueden echarse a perder más rápido si la temperatura no se ajusta correctamente. Esto podría deberse a que el termostato del refrigerador está demasiado alto o demasiado bajo, o está roto y necesita reparaciones.
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