Sin importar las circunstancias, no deberías dormir con el celular bajo la almohada. Usar el móvil no está mal, al contrario, es necesario tenerlo a la mano para estar en constante comunicación, ver lo que sucede a nuestro alrededor y mantenernos conectados con el mundo a través de Internet.
Pero como sabrás, todo en exceso es malo. Puedes estar en el día con tu teléfono, ya cuando sea la hora de dormir, debes dejarlo lo más alejado posible de ti.
Tener tu celular tan cerca afectará tu descanso
Tenerlo cerca, no hará que concilies el sueño. Además, ponerlo debajo de tu almohada hará que se activen las células cancerígenas.
Según los departamentos de salud, dormir con el móvil hace que su radiación le haga daño a la persona internamente. Puede parecerte ilógico o fuera de lugar, pero los expertos de la medicina lo dicen muy seriamente:
“Aunque la ciencia todavía está evolucionando, existen preocupaciones entre algunos profesionales de salud pública y el público en general sobre la exposición prolongada y el alto uso de la energía emitida por los celulares”, explican los investigadores.
Los efectos que tiene el celular en tu cabeza serán a corto plazo, la energía que emite tu teléfono hace que los tejidos se calienten haciendo que no puedas dormir provocándote ansiedad y estrés.
Esto es lo que produce la energía que emite tu celular en tu cuerpo:
– Falta de sueño
– Aumento de la hormona del estrés: cortisol
– Migraña
– Tumores en zonas de mayor presencia de energía
– Propenso a sufrir de cáncer
– Dificultad de atención y aprendizaje No te vas a morir si dejas tu celular a un lado, la mejor manera de conciliar el sueño y hacer que tus sentidos descansen bien, es apagando todo. Así tu cerebro podrá descansar ya que ha trabajado todo el día.
No perjudiques tu salud por tu móvil, recuerda que al día siguiente lo podrás usar, así se trate de actividades como pedir la despensa a domicilio. Siempre será mejor hacerlo a plena luz del día.
