Por supuesto que una buena higiene es fundamental para que tengamos un olor corporal agradable, pero podemos ayudarnos más si dejamos de consumir alimentos que propician el mal olor, pues este no viene sólo del sudor.
Podemos tener mal aliento a pesar de cepillarnos, por ello es que nuestra alimentación no sólo nos ayuda a estar más o menos saludables, sino a oler mejor o peor.
Lista de alimentos que deberías dejar si quieres mejorar tu olor corporal
Mucha proteína
Si seguimos una alimentación muy rica en proteínas, puede dejar huella en nuestro olor corporal.
Cuando reducimos la cantidad de vegetales, frutas, legumbres y cereales y en su lugar consumimos raciones generosas de proteína animal para sentirnos saciados, el cuerpo puede llegar a un estado de cetosis donde transformará la grasa en energía para seguir alimentando el cerebro.
La cetona, un subproducto de la cetosis, se perciben en el aliento y en un olor no demasiado fresco del cuerpo, similar a fruta agria.
Comidas muy condimentadas
En una alimentación con muchas especias y hierbas, en especial el comino o la cúrcuma, pueden alterar nuestra fragancia natural.
Así que tenlo en cuenta antes de preparar un plato con estos ingredientes, y mira que esté acorde con tus actividades sociales. Si tienes una cita, reunión o entrevista de trabajo, no querrás comer curry la noche anterior.
Comida chatarra o muy procesada
Tu cuerpo no puede digerir correctamente muchos alimentos procesados, ya que no se encuentran en su forma natural. Esto quiere decir que tu cuerpo necesitará mucho más tiempo para gestionarlos (metabolizarlos), dando paso a su fermentación o putrefacción, cuyo olor puede salir por los poros.
Cuando no consumimos suficiente fibra y no tenemos un tránsito intestinal regular, parte de las toxinas pueden liberarse a través de los poros de la piel.
Alimentos fritos
Igual que los alimentos procesados, los alimentos fritos pueden provocar un olor corporal desagradable. Además de favorecer los gases, situación que s vuelve muy incómoda.
Exceso de lácteos
Es difícil para el cuerpo romper las moléculas de estos productos, y en su proceso, se liberan compuestos azufrados que provocan que tu aliento huela a como a huevos podridos por el sulfuro.
Para algunas personas esto conlleva gases o estreñimiento, lo que quiere decir que las toxinas malolientes salen a través de la piel si no las eliminas a través de un tránsito intestinal regular.
Azúcares refinados
Los solemos encontrar en los refrescos industriales y en los alimentos más procesados, pero además alimentan las bacterias que provocan mal aliento, y si tienes candidiasis, el azúcar alimentará la levadura y provocará gases.
Así que ya lo sabes. Además de usar perfume, evita el consumo de estos alimentos y te sentirás mucho mejor.
