Esta receta en estufa es simple y satisfactoria. Aprende a hacer este practico y rico desayuno, que además es muy versátil porque se puede mezclar con muchos ingredientes
Hacer avena desde cero es casi tan simple como abrir un sobre de las cosas instantáneas. No lleva mucho más tiempo, ¡pero es mucho más satisfactorio!
Y como a la gente le encanta eso, pensé que sería divertido compartir los consejos de cómo hacer que la avena en la estufa sea como un profesional. Así que aquí se explica cómo prepararla de forma rápida, sencilla y deliciosa en la estufa.
Todos sabemos que normalmente prefiero mi avena en forma de galleta (como con esas galletas con arándanos y chocolate blanco). Pero un buen tazón para desayunar es muy útil por la mañana y me encanta jugar con complementos y coberturas. Algunos favoritos:
- Arándanos secos o pasas
- Rodajas de manzanas o duraznos
- Chips de chocolate + plátanos
- Una cucharada de mantequilla de maní y miel.
- Jarabe de arce o azúcar morena
- Almendras, pistachos o nueces.
Una vez que haya tomado algunas decisiones sobre cómo la vas a acompañar, puede concentrarse en la técnica. Tengo algunos consejos:
La avena pasada de moda dará más textura; La avena rápida será más cremosa y se cocinará un poco más rápido.
Si compra la avena pasada de moda y decide que prefiere la avena de cocción rápida, ¡un pulso en la licuadora o procesador de alimentos le proporciona avena rápida en menos de un minuto!
Si las hojuelas amenazan con burbujear hacia arriba y hacia los lados de la sartén cuando los agrega al agua caliente, debe reducir el calor.
Tu avena necesita una pizca de sal para ser perfecta.
Cocínala, no en leche (la leche llega más tarde). Quieres agua hirviendo. El agua hirviendo la convertirá en una especie de pegamento pegajoso. Debes llevar el agua a ebullición y luego reducir el fuego a fuego lento antes de agregar las hojuelas. Agitar ocasionalmente, solo para evitar que se pegue, es cómo se obtiene esa textura perfecta.
